El verano ya es una realidad en España, lo que implica que ha llegado el momento de disfrutar al máximo de la playa y la piscina. Sin embargo, aunque cuando el calor aprieta a todo el mundo le gusta darse un buen baño, no todos los lugares son aptos para montar una piscina. De hecho, hay algunos en los que hacerlo es realmente peligroso.
Es lo que sucede con las terrazas de las casas, lugares que no siempre están preparados para asumir una carga de peso tan elevada. De hecho, este tipo de lugares como terrazas, balcones y patios ubicados sobre garajes no están diseñados para aguantar tanto peso. Y si la sobrecarga es muy grande las consecuencias podrían ser fatales.
Si observamos cuánto suelen pesar las piscinas hinchables y desmontables, la mayoría cuentan con pesos de 500 kilos por metro cuadrado. Y, por norma general, los suelos de la terraza están preparados para aguantar algo más de 200 kilos el metro cuadrado, una cantidad significativamente inferior.
Esto no implica que si se sobrepase este peso se vayan a producir daños sí o sí, ya que normalmente la carga de peso se redistribuye y existen coeficientes de seguridad que hacen que soporten más de esos 200 kilos por metro cuadrado. Sin embargo, por encima de esos límites el riesgo es grande. De este modo, según señalan los expertos, lo ideal sería poner una piscina pequeña y que no sobrepase los 20 centímetros de altura.
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