Aunque hasta la fecha dejar al perro atado en la puerta del supermercado mientras se hacía la compra era algo legal, dentro de unos meses esta práctica estará castigada con una multa. Algo que se debe a la entrada en vigor de la nueva Ley de Bienestar Animal, que contempla castigos económicos para los dueños que dejen a sus animales atados sin supervisión.

A partir del próximo 29 de septiembre, que es cuando entrará en vigor la nueva normativa, estará prohibido dejar atados y sin supervisión a los perros. Y no importa si se trata de una farola, una valla o cualquier otro lugar.

Así lo recoge el artículo 27 de esta ley, que señala la prohibición de “mantenerlos atados o deambulando por espacios públicos sin la supervisión presencial por parte de la persona responsable de su cuidado y comportamiento”.

De este modo, a partir de su entrada en vigor quienes dejen al perro atado para entrar en el supermercado se exponen a una multa que será considerada como una infracción de carácter leve. Eso sí, la sanción económica irá de los 500 a los 10.000 euros, cantidad que finalmente dependerá de la comunidad autónoma de la que se trate.