La cadena alemana ha invertido una importante cantidad de dinero en sus supermercados para darles una nueva imagen y conquistar nuevos clientes.

La cadena alemana ha invertido una importante cantidad de dinero en sus supermercados para darles una nueva imagen y conquistar nuevos clientes.

Lidl parece haber apostado por secciones olvidadas en los grandes supermercados como los frescos o la panadería. Así como otra de las claves de este nuevo supermercado: la fruta y la verdura. Dos expresiones clave dominan esta sección: alimentos ecológicos y siempre de «productores locales».

Conscientes de que la clave está cada vez menos en el precio ahora Lidl o Mercadona tratan de convencer a sus clientes de que ofrecen productos tan cercanos como los supermercados regionales.

Otro concepto es el de «vendemos de todo» en el que no sólo compras alimentación. Mientras te compras alimentación puedes descubrir un mercadillo de ropa para deporte o electrodomésticos situado en el centro de la tienda y de paso obligado para cientos de clientes.

La comida para llevar y preparada en la zona de congelados es otra de las grandes apuestas. Una alimentación destinada a gente sin tiempo para cocinar.